Sedientos de Tinta

Soy una cabecera que desaparece y reaparece, algunas veces...

- sábado –

La tensión se respiraba en los alrededores del Campo de Quidditch, todos rumoreaban sobre si los freaks que estaban en el equipo de Slytherin podían hacer trampa.


-en el vestuario Slytherin-

Miranda: mira Luca, no me importa que demonios seas, eras mi capitán, pero por sobretodo has sido mi amigo.

William: si, hombre, tú también has estado como un verdadero amigo para mi en mis peores momentos, claro que tienes mi apoyo.

Samuel: Willie tiene razón, no solo eres mi capitán, eres el príncipe de Slytherin, y yo contigo hasta el infierno y de regreso, y tú Ariel que piensas?

Ariel: yo no pienso, somos un equipo, y al parecer todos apoyan al capitán, no puedo ser menos.

Luca miraba con atención pues le consternaba el hecho de no poder leer la mente de Ariel, evidentemente el muchacho sabía oclumancia, la pregunta era porque. Pero los pensamientos de Luca fueron interrumpidos por los vítores de aliento del resto del equipo.

Cuando salieron al campo de juego el silencio se apoderó del estadio. El resto de los chicos había decidido ir ocultos bajo el hechizo de invisibilidad de Pity y se habían ubicado en una grada especial oculta bajo la torre de locución.

Al llegar al centro del campo la Prof. Allison Chutney los esperaba.

Allison: bueno, equipos, ya saben las reglas, nada de golpes sucios.

Julian: Prof. Chutney, debo objetar a algunos jugadores del equipo Slytherin, evidentemente no estamos en igualdad de condiciones y pedimos que nos den por ganado el partido automáticamente.

Varios del Equipo Slytherin: noo, ehh!!

Allison: basta, silencio; no tan rápido Sr. Bones, para esa “desigualdad de condiciones” que usted alega, ya hemos pensado una solución.

La Prof. Chutney sacó de un pequeño bolso tres botellas y se las repartió a Luca, Pixie y Cissa.

Allison: esta poción está especialmente diseñada para inhabilitar cualquier habilidad mágica de las personas por un par de horas, así que tómenla tranquilos.

Cissa: y porqué no sabíamos de esto antes?

Pixie: si, esto puede ayudarnos.

Allison: por que esta poción es muy peligrosa...

Luca: si se toma a largo plazo tiene efectos secundarios que no quieren saber.

Allison: -mirando con enojo a Luca por interrumpirla- Sr. Malfoy limítese a tomar la poción, así damos comienzo al encuentro.

Los tres bebieron la poción al unísono.

Pixie: -hablándole a Cissa- seremos muggles por un tiempo... qué vergüenza!

Y con el pitido se montaron en sus escobas y se dispusieron a jugar quidditch.

La locución del partido había sido tan normal como cualquier otra, Pity y Teddy tenían la impresión de que pronto la tensa calma que los rodeaba habitualmente volvería.

Pity: y Slytherin gana!!!!!!!!!!!!!!!

Teddy: Black ha atrapado la Snitch en una magnífica maniobra!!!

Pity: el resultado final es Slytherin 190, Hufflepuff 140...

Teddy: esto es todo por hoy... –y dio las habituales recomendaciones.

Apenas terminó el partido se dirigieron al cuarto que compartían. Teddy fue el primero en bañarse mientras que Pity se sentó en el pequeño piano de pared que Victoria les había regalado, por alguna razón era algo que la chica siempre había soñado tener y nunca se había animado a pedir.

En realidad Victoria le había caído muy bien, congeniaban en muchas cosas, junto a ella se sentía querida y la chica la apreciaba como una buena amiga, algo compinche.


- por la noche -

Harry entró en la sala común, donde casi todo el EF estaba esperándolo, además de Aldanoy y Fausto.

Harry: buenas noches, chicos, quienes faltan?

Albus: -con tono burlesco- el príncipe de Slytherin y su sombra de hielo.

Tanto Aessa como Julie rieron, mientras que otros disimularon haber tosido, sólo Pixie y Pity miraron con desprecio al castaño.

Harry: suficiente de comentarios extras, hijo... es decir, Potter. Donde están?

Fing: dijeron que vendrían mas tarde.

Harry: -resoplando- no puedo empezar si no están todos, así que...

Luca: ya, tranquilo, disculpa el retraso.

Tanto el rubio como Cissa habían entrado por la puerta principal y en seguida tomaron asiento.

Harry: muy bien, ahora si. Chicos, como saben, van a empezar a entrenar con Lockhart y McKenzie. He hablado con ellos y parece que lo mejor es que entrenen en parejas, uno con Aldanoy y otro con Fausto.

El azabache esperó algún tipo de respuesta, pero todo lo que hubo fueron intercambios de miradas y algunos murmullos.

Harry: bueno, me tengo que retirar, les dejo para que charlen. Hijo, podrías venir un minuto?

Albus se levantó y acompañó algo resignado a su padre hasta el pasillo.

Albus: qué pasa, papá?

Harry: quisiera saber si mi mapa ha llegado, por alguna casualidad, hasta Hogwarts?

Albus: ya te fue Lily con el cuento, no?

Harry: de hecho, Lily no quiso hablar... verás, hijo, en cualquier otra situación te lo pediría de
vuelta, pero creo que lo necesitan mas ustedes.

Albus: a qué te refieres?

Harry: veo que solo lo usan para aventuras. Úsalo para saber quienes son los que están causando todos estos destrozos, no me digas que no se te había ocurrido?

Albus: -avergonzado- bueno, no...

Harry: alguien más sabe que lo tienes?

Albus: -desviando la mirada- si, Fingolfin.

Harry: -algo extrañado- bueno, supongo que no hay problema, procura que nadie mas lo sepa.

Albus: de acuerdo.

Harry: ni siquiera Parker, esa chica provocaría el Apocalipsis si supiera como.

Albus: el apoca... qué?!

Harry: no importa, ve con los demás y cuídate.

Harry abrazó a su hijo y luego se retiró.

Cuando Albus volvió a la sala, estaban todos callados esperándolo, aparentemente.

Fausto: muy bien, ahora podemos empezar. Cómo prefieren que decidamos quienes van a ser los primeros en estar en nuestras manos? Eh?

Todos miraron al muchacho con cierto recelo y nadie se ofreció.

Pity: primero, hay algo que tienen que saber, parece ser que algunos de nosotros ya teníamos... dones antes del ritual.

Aldanoy: ah, si? Y quienes?

Pity: bueno, estamos... yo... y Pixie...

Pixie: soplona.

Pity: y Albus también...

Fing: y yo.

Pixie: ya tenías poderes?

Fing: bueno, siempre pensé que eran ilusiones mías, pero cuando descubrí... esto, me di cuenta que no.

Fausto: alguien mas?

Nadie respondió.

Aldanoy: creo, Fausto, que lo mejor es que sepamos que poderes tienen y después veremos como entrenaremos.

Fausto: me parece bien, quien empieza?

Pity: yo controlo el clima...

Luca: yo leo pensamientos –indiferente.

Fausto: controlas...

Luca: no, leo.

Fausto: de acuerdo –levantando las manos- estemos en paz, hermano.

Luca: no soy tu hermano.

Eleo: yo levito –agregó antes de que empezara una nueva pelea.

Nymp: yo soplo.

Aldanoy: soplas?

Nymp: si, pero muy fuerte.

Fausto: ah, ya, controlas el viento.

Nymp: y yo que dije?

Aessa: si vamos a decirlo así, yo quemo.

Teddy: yo exploto.

Julie: yo... paso?

Aldanoy: oh, vamos, dinos.

Julie: les estoy diciendo, yo paso...

A continuación, hizo que su mano atravesara el suelo.

Julie: ves?

Aldanoy: si, si, entiendo.

Odi: yo... me transformo? No sé como explicarlo, ni se los puedo mostrar, mi cuerpo cambia de material cada vez que toco algo.

Fausto: ya nos ocuparemos, quien mas?

Cissa: esto no me gusta.

Pixie: parecemos un grupo de loquitos contándonos que tan amargada es nuestra vida y lloriqueando para que los demás nos tengan lástima.

Fing: grupos de auto-ayuda?

Pixie: -sonriente- eso!

Fausto: y bien, Pixie, cuéntanos cual es tu poder.

Pixie: ja, muy gracioso, controlo la electricidad, contento?

Fausto: mucho.

Fing: supongo que podría decirse que controlo el tiempo –mirando receloso a Fausto.

Aldanoy: muy bien, faltan ustedes dos.

Seffy: es que yo no he descubierto de que se trata.

Aldanoy: ya averiguaremos de qué se trata. Cissa?

Cissa: controlo el hielo.

Luca: de hecho, ella tiene más de un poder.

Albus: por qué?

Cissa: por que yo quiero, minino, a ti que te parece?

Pity: no empiecen! Cissa, puedes explicarlo?

Cissa: -resoplando- se llama empatía, puedo sentir y controlar el estado anímico de todos.

Alda: falta alguien más?

Albus: si, yo,...

Pixie: pero si lo tuyo es fácil de explicar –con una gran sonrisa.

Cissa: si, eres la babosa mas linda que he visto en mi vida!

Hubo algunas risas por el comentario.

Alda: Cómo es eso?

Albus: soy animago.

Fausto: eso no es nada extraordinario...

Albus: pero me puedo convertir en cualquier animal, incluso criaturas mágicas.

Luca: -resoplando- tanto aire se iba a dar...

Antes de que Albus pudiera replicar, Alda se incorporó y elevó la voz para que la escucharan.

Alda: bueno, tenemos mucho camino por delante, Facus prepara una poción reveladora para saber que poder tiene….eh…

Seffy: Perséfone, pero todos me dicen Seffy.

Alda: eso Seffy, así ya puedes empezar a entrenar; los demás sepárense en grupos así podemos organizar los entrenamientos.

-

Al otro del salón Albus y Fing hablaban en secreto.

Fing: estas seguro que nadie se dará cuenta? mira que ahora que compartimos todos el mismo piso, pueden notar nuestra ausencia.

Albus: que te digo que no!, mira salimos con la excusa de entrenar y listo, nadie notara que no estamos.

Pity: Luca, rápido, que están hablando Fing y Albus?

Luca: algo sobre escaparse al pueblo y de un mapa.

Pity: mm, si esos piensan que se irán sin nosotros están muy equivocados.

Alda y Facus organizaron grupos de entrenamientos para cada día de la semana, y antes de que llegara la medianoche todos se retiraron al piso que compartían.


- domingo por la mañana –

Las primeras luces del alba dominical entraron en la ventana del cuarto, una joven pareja dormía abrazada, una figura que los observaba tras la puerta se marchó rápidamente al sentir que la joven despertaba.

Pity: -resoplo- Ted, despierta, que ya amaneció

Ted: ¿los pajarillos cantan y la luna ya se metió? -riendo.

Pity: no seas gracioso, anda, que tenemos que seguir a los leoncitos, tú vístete mientras que yo voy por las chicas.

Ted: listo, ve tranquila.

Antes de que todos despertaran, el grupo de Ravenclaw, incluyendo a Teddy, estaban en la sala común que compartían, completamente invisibles al ojo humano, gracias al hechizo que Pity solía utilizar.

Pronto escucharon un par de susurros y el ruido de los escalones mientras que el grupo conformado por Fing, Albus, Luli, Aessa y Odiseo, bajaba.

En las habitaciones de los Slytherin...

Luca: Cissa, despierta, pasa algo –sacudiendo a la muchacha.

Cissa: ya! Luke! no molestes! Es domingo!! Y es muy temprano.

Pix: ta bueno, Cissa, despierta o perderemos el rastro.

Cissa: wtf!!!

Luca: lo que Pixie te trata de explicar es que los amiguitos de Fing planean ir a Hogsmeade, y que Pity los va a seguir, pero…-explicaba el joven.

Pix: pero ni Pity ni sus amigas están en sus cuartos –terminó la frase la colorada.

Cissa: y nosotros seriamos los únicos sin ir?

Los dos chicos asintieron con la cabeza.

Cissa: ni loca me pierdo esta oportunidad de salir, ya me visto –dijo levantándose de la cama con mucha rapidez y dirigiéndose al baño.

En menos de dos minutos la chica estaba lista, y los tres bajaron cautelosos, hasta que vieron las figuras de los Gryffindors cerca de la puerta, observaron como Fing le pedía a su hermana que atravesara la pared que verificar que ni Filch, ni la Sra. Norris estaban cerca, y cuando los cinco chicos dejaron la sala común los empezaron a seguir.

Iban por el pasillo que va a la torre norte cuando Cissa, sintió que la tomaban de la mano.

Seffy: shh, no hagan ruido –dijo cerca del oído de la rubia.

Los tres muchachos se dieron vuelta pero no vieron a nadie, hasta que la capucha de Pity, cayó dejando al descubierto su cabeza.

Pity: tomen estos antejos y no digan nada, rápido.

Pix: a mi no me das ordenes –reclamó la joven.

Luca: Pix, ahora no! –la calló su primo.

Los tres tomaron las gafas de sol, y cuando se las colocaron pudieron ver al resto de los chicos, y como Pity con un movimiento de la varita los volvía invisibles a ellos también.

Se unieron al grupo y avanzaron guiados por Eleo. Mas adelante iban los otros chicos guiados por Albus, que parecía algo desorientado.

Albus: no recuerdo si aquí debemos doblar a al izquierda o a la derecha –mirando a ambos lado del pasillo.

Odiseo: como que no te acuerdas? que clase de timonel eres? –reclamó.

Aessa: que acaso estamos perdidos?

Albus: no, claro que no, esperen un segundo.

Luli: Anda que yo ya tengo hambre!!

Albus buscó en su morral hasta que sacó un viejo pergamino y susurró casi a escondidas unas palabras, entonces un mapa se reveló.

Lo observó con cuidado y se dio vuelta un par de veces para mirar a sus alrededores.

Aessa: que pasa? Por que miras tanto hacia atrás? –preguntó intrigada.

Albus: esto no me gusta nada, Wilhelm, mira esto –llamó a su compañero con la mano.

Fingolfin se acercó a su amigo, algo molesto porque éste lo llamara por su apellido, observó el mapa.

La expresión de su rostro cambió. Ambos muchachos se miraron. El morocho sacó su varita y apuntó hacia delante, Albus y las chicas hicieron lo mismo

Fing: revélense –ordenó señalando con la varita hacia un punto del pasillo.

Todos los chicos se dieron vuelta para esperar una orden de Pity, que lucia tranquila. La chica le hizo una seña a Eleo, y sus amigos. Luca, Cissa y Pixie no entendieron el significado de las señas, pero las comprendieron cuando vieron los movimientos de los otros chicos.

Eleo apenas se dio un pequeño impulso y se elevó por el aire hasta llegar por detrás del grupo de Gryffindors, que seguían temerosos apuntando a la nada. Tanto Teddy como Seffy y Nymp se posicionaron por los costados del grupo y les apuntaron con sus varitas. Luca y las chicas entendieron lo que Pity había indicado y se unieron a los demás.

El grupo de Fing y sus amigos había quedado rodeado por el otro grupo, entonces Pity dejó caer su capucha y habló, aunque en su cabeza un montón de teorías daban vueltas estaba casi segura que lo que Albus sostenía en la mano era el famoso “mapa del merodeador”, una invención del abuelo del muchacho y que había sido de gran utilidad a Potter padre en épocas oscuras.

Pity: tú a mi no me das ordenes -dirigiéndose a Fing- baja tu varita y ríndete, están rodeados –los demás chicos dejaron caer sus capuchas- así que son ustedes los traidores que tantos problemas nos han traído?

Un silencio tenso colmó el pasillo en el que se hallaban los chicos, Pity suponía que los autores de todos los destrozos y problemas en la escuela eran Fing y sus amigos, aunque mantenía la duda respecto del ataque que los había dejado en la enfermería por varios días, tiempo atrás. Porque si Fing y sus amigos tenían el mapa, tranquilamente podrían andar por todo el castillo sin ser descubiertos, pero entonces quien los había atacado aquel día en la sala de ensayos?

Recordó entonces un viejo hechizo multiplicador, pero ese tipo de conjuro era de magia oscura y entonces toda su teoría no tenía sentido. La chica se debatía entre acusar a su nuevos amigos o no. Ya que los hechizos multiplicadores de personas no pueden realizar hechizos propios solo repiten el hechizo que su dueño utiliza, además algunos de los mas dañados en el ataque eran Albus y el propio Fingolfin.

Fing: a qué te refieres con problemas? Nosotros no hemos hecho nada!

Los chicos comenzaron a gritarse unos a otros, hasta que de pronto, de la nada, una figura masculina apareció caminando muy tranquila con un pequeño bolso de mano.

Ignorando por completo la situación, se detuvo junto a Pity y le habló, como si supiera el debate interno que la chica tenia.

Matt: no fueron ellos y lo sabes, ahora vamos que se nos hace tarde –le dijo con suavidad.

Pity bajó su varita y fue caminando como si nada tras de Mathius, Ted tomó el mapa de la mano de Albus, aún confundido, y caminó detrás de su novia. Los demás chicos hicieron lo mismo, los Gryffindor se quedaron intrigados sin entender nada.

Albus: mi padre va a matarme...

Nymp: y vienen o no?? –le dijo al grupo de Gryffindor.

El grupo de chicos caminaba en silencio detrás de Matt que parecía conocer el camino a la perfección. Iban por un oscuro pasadizo al que apenas iluminaban unas velas flotantes que nunca se consumían.

Pity: estas seguro, Matt? –preguntó.

Matt: claro que lo estoy, pero fue muy buena tu idea para obtener el mapa.

Por alguna extraña razón Matt y Pity compartían una “conexión” especial, una simbiosis fraterna, se habían hecho grandes amigos y parecía que se conocieran de toda la vida, hablaban como si supieran exactamente lo que la otra persona sentía, en el tiempo que había transcurrido desde la llegada a Hogwarts de Matt, los dos chicos se sentían como si fueran “hermanos”.

Ted: si, la verdad te pasaste, ahora podremos controlar los movimientos de los alumnos y tender una buena trampa a los traidores.

Luli: a donde vamos?? –intrigada, preguntó mientras seguía caminando.

Matt: no se ustedes pero yo voy a tomar sol y a tirarme a la pileta.

Aessa: y como lo harás si afuera es invierno?

Matt: porque saqué un turno en “Summertime”, un negocio que hay por el callejón E de Hogsmeade.

Odiseo: creo que escuché de ese negocio, pero ¿no es algo caro?

Matt: no sé, lo pagó mi abuela –respondió sin cuidado.

Fing: y me puedes decir como piensas que ibas a salir del colegio sin el mapa, que nos quitaron?

Matt: yo no necesito el mapa, soy muy intuitivo.

Luli: ya, Fing, deja de quejarte.

Odiseo: además estas de short y ojotas, afuera no esta nevando? –remarcó el muchacho, viendo la vestimenta del otro chico.

Matt: -algo enojado- miren soy muy intuitivo y nunca me pierdo, además soy inmune al clima, ya estamos llegando, a ver si nos dejan en paz.

Los chicos atravesaron una pequeña puerta y se encontraron en una casilla de vigilancia abandonada, que se hallaba en un de los extremos de la calle principal del pequeño pueblo.

Los Ravenclaw que no tenían decidido ningún plan para pasar ese domingo quisieron acompañar a Mathius a la pileta, igual lo hicieron los Gryffindor. Tanto Fing como Albus intentaron varias veces sacar de la mochila de Ted el mapa pero no pudieron.

Todos pasaron un día genial y se divirtieron mucho.


-un mes después-

Los días pasaron, y las semanas dieron comienzo a un frío y blanco diciembre. Los chicos entrenaban arduamente, según el cronograma que les habían hecho Alda y Facus –como le gustaba que le dijeran a Fausto-, poco a poco los chicos pudieron aprender a dominar sus poderes, mientras descubrían que éstos tenían mas alcance de lo que ellos imaginaban. Además, casi todos habían limados las asperazas que los separaban y trabaron una linda amistad con Matt, Facus y Alda, aunque, por supuesto, había algunas excepciones.

Siguiendo el plan que habían diseñado, dejaron las rondas de guardia. Durante este tiempo, hubo mas accidentes como pintadas en los muros anti-muggles, y objetos dañados en las clases que tenían profesores o conocimientos muggles, pero los chicos habían decidido no actuar, hasta poder controlar sus poderes.

Por otro lado la banda había progresado mucho y ya tenían un tracklist para el baile. Draco se había presentado a principios de diciembre, para anunciarles que habían organizado un baile de navidad en el que ellos tocarían, con el fin de integrarlos al resto del alumnado. Pero a pesar de los deseos de los directores, las cosas no mejoraban en absoluto...

Seffy, Eleo y Pity estaban reunidas en su sala común comentándose unas a otras las novedades de sus entrenamientos.

Seffy: menos mal que no tengo que tomar más esa poción, ya estaba enfermándome!

Pity: y porqué no tienes que tomarla?

Seffy: ah no les conté! Es que al fin descubrimos cual es mi poder,... bueno, en realidad lo descubrió Facus -sonrojada.

Eleo: -aguantándose la risa- qué sucedió?

Seffy: bueno, Facus estaba diciéndome que yo era demasiado educada, demasiado controlada y que por eso mi poder no se revelaba, y que tenía que dejarme llevar a veces... y eso me molestó un poco...

Pity: un poco?

Seffy: bueno, bastante, el punto es que Facus estuvo encerrado por dos horas en una especie de jaula...

Pity y Eleo comenzaron a reír, aferrándose sus costillas. Cuando pudieron respirar...

Pity: exactamente... -suspirando- a qué te refieres con jaula?

Seffy: una caverna creció alrededor de él!... en otras palabras, controlo y moldeo la tierra a mi gusto -orgullosa.

Eleo: eso es impre...

Se escuchó un portazo, y al voltearse, las chicas vieron a Nymp en el umbral de la puerta: estaba completamente violeta.

Pity: -incorporándose- pero qué te sucedió?

Nymp: -indiferente- otra de sus bromas, pero saben qué? creo que el violeta les queda mejor a ellos, no?

Eleo y Pity asintieron lentamente con una sonrisa, mientras que Seffy negaba con la cabeza.

Nymp se perdió de vista por el pasillo. De pronto, las chicas sintieron como un fuerte viento entraba por las ventanas de la sala común, y atravesaba la misma hacia el pasillo. Cuando el viento se calmó, se escucharon unos gritos.

Nymp: no es para tanto! les queda muy bien!

Las chicas salieron al pasillo y comenzaron a reír cuando vieron que un grupo de tercero se hallaba al final del corredor, totalmente empapados en la pintura violeta que momentos antes estaba encima de Nymp.

Los estudiantes desaparecieron doblando la esquina, mientras las chicas se secaban las lágrimas sin poder parar de reír.


-antes de la hora de cenar-

Pixie estaba con las manos apoyadas en el lavabo del baño que compartían las chicas en el nuevo piso. Estaba quieta y muy concentrada intentando controlar la intensidad de los pequeños rayos que sus manos emitían.

Decidió descansar y, luego de lavarse la cara, entró en uno de los pequeños sanitarios de puerta blanca.

Abandonó distraídamente el sanitario, cuando una mano la tomó fuertemente por el codo desde atrás y la arrastró nuevamente dentro del baño.

La muchacha se sorprendió al ver al muchacho, el chico le soltó el brazo, pero en seguida la tomó por el cuello y la acorraló contra la pared, levantándola unos centímetros del suelo.

Pix: pero que rayos te sucede?- tratando de respirar.

0 comentarios:

Publicar un comentario